En estos días, entre las lecturas sobre Hörderling, el arreglo y scaneo libros de Benavento, más los trabajos en las escuelas y la vida misma, también esperaba una encomienda proveniente de Mendoza. En fin, llegó. Entonces, con alegría comparto que Bruma Ediciones me incluyó, y yo accedía a participar en una edición titulada La Otra Orilla, en base a un concurso llamado Juan L. Ortiz. Totalmente agradecido. Aquí les dejo con el siguiente:
POEMA DE LOS POETAS
Juan Laurentino pasea por Paraná,
anda en un Dodge 1500 con todos los azules
lo hace despreocupado, sin tensiones
al salir del ferrocarril
entre paredones y el adoquín
se pierde
en la sombra de la seis de la tarde;
como Marta Zamarripa
en Victoria
detrás de la sombra del Colegio Nacional;
o como Zolo , en éste momento, en su sombra.
¡Ay!, cuántos poetas nuestros…
Háblenme de la última noche
¡Poetas!, háblenme del Dios
que algunos están buscando,
poetas,
hablen y digan
si en algo se nos parece
y esa será su poesía.
Pág. 25-26 de La Otra Orilla Ed. Bruma Ediciones
POEMA DE LOS POETAS
Juan Laurentino pasea por Paraná,
anda en un Dodge 1500 con todos los azules
lo hace despreocupado, sin tensiones
al salir del ferrocarril
entre paredones y el adoquín
se pierde
en la sombra de la seis de la tarde;
como Marta Zamarripa
en Victoria
detrás de la sombra del Colegio Nacional;
o como Zolo , en éste momento, en su sombra.
¡Ay!, cuántos poetas nuestros…
Háblenme de la última noche
¡Poetas!, háblenme del Dios
que algunos están buscando,
poetas,
hablen y digan
si en algo se nos parece
y esa será su poesía.
Pág. 25-26 de La Otra Orilla Ed. Bruma Ediciones